“Un equipo o sistema es una red de partes interrelacionadas donde el resultado es mayor que la suma de las partes. El funcionamiento ideal se alcanza cuando los miembros del equipo o sistema aprenden a establecer relaciones intencionales y conscientes”
Coaching relacional o de equipos
Es un proceso de dinamización y acompañamiento de equipos mediante el cual el equipo se desarrolla, aprende a mejorar su funcionamiento interno y a utilizar todo su potencial para conseguir resultados extraordinarios.
El rasgo más distintivo respecto al coaching personal es que el coaching de equipos se enfoca en la relación que une al equipo, no en sus miembros.
El objetivo no son los proyectos o tareas que ha de realizar el equipo, sino desarrollar su capacidad para llevarlas a cabo con autonomía y sin necesidad de ayuda externa. “No se trata de dar pescado, sino de enseñar a pescar”.
¿Para qué se utiliza?
- Para cohesionar equipos y mejorar exponencialmente su funcionamiento
- Para impulsar cambios estratégicos u organizativos y facilitar el alineamiento de sus miembros
- Para transformar el clima y la cultura del equipo
- Para transformar las emociones que limitan la eficacia del equipo
- Para potenciar la productividad, creatividad e innovación del equipo
- Para superar bloqueos, obstáculos y limitaciones
- Para utilizar el conflicto como herramienta de crecimiento y creatividad
¿Qué aporta?
- Un mayor alineamiento de sus miembros y un compromiso más consciente con los objetivos del equipo
- Una comunicación e interrelación entre sus miembros intencional y consciente
- Herramientas eficaces para gestionar los conflictos internos
- Más eficacia y mejores resultados
- Un mayor grado de satisfacción de todos sus miembros
Un proceso de coaching relacional o de equipos se desarrolla, habitualmente, en las siguientes fases:
- Definición de la alianza entre sus miembros (reglas del juego)
- Definición de la alianza con el coach y establecer la dinámica de trabajo
- Definición de los objetivos que el equipo persigue con el proceso de coaching
- Sesiones de trabajo periódicas (semanales o quincenales) para: analizar los cambios que el equipo necesita, potenciar la relación entre sus miembros, eliminar obstáculos, asumir nuevos retos, resolver conflictos de intereses...
- Sesión de revisión durante el proceso de coaching: feedback sobre el avance y redefinición de objetivos cuando sea necesario
- Continuación de las sesiones de trabajo periódicas
- Sesión de finalización y cierre del proceso de coaching
La duración recomendada de un proceso de coaching relacional o de equipos oscila entre 6 y 12 meses